Karina Mondaca

El trabajo terapéutico nos invita a revisar la biografía y los procesos para comprender el devenir de la individualidad en el presente y en relación a su contexto. Durante el desarrollo nos relacionamos con el entorno incorporando aspectos de este, instalando hábitos y formas que se van fijando en medida se repiten y van marcando nuestras tendencias o respuesta frente al mundo. Sumado a esto, habita la esencia que también muestra sus matices y colorea los aspectos que vamos adquiriendo en el transcurso de la vida. La emocionalidad es la que nos indica como estamos sintiendo los aspectos del mundo y si las tendencias o respuestas que desarrollamos nos llevan a la salud o al desequilibrio. También el pensamiento y la voluntad son ejes importantes que dan cuenta de la organización del yo en la vida anímica de cada ser humano. En terapia podemos observar las facultades del alma y el influjo de estas en la actividad interior y exterior del ser y de esta manera poder activar en un trabajo interior el potencial de la consciencia y desarrollar comprensión, perspectiva y claridad respecto de las propias formas, buscando acercarnos a la flexibilidad y así llegar a trabajar y modificar lo que no nos permite alcanzar una salud mental. trabajando permanentemente en una coherencia en el pensar, sentir y actuar del ser humano, apelando a las fuerzas del corazón.

Atiende familias para guiar el proceso de crianza de niños y jóvenes acompañando con terapia floral.

Orientación vincular en diadas familiares, madre – padre e hijos y parejas.